jueves, noviembre 02, 2006

Barça - Chelsea, empate de expedientes

El partido del pasado martes en el Camp Nou todavía colea. UEFA ha anunciado hoy mismo que investigará lo sucedido en el partido así como las airadas protestas del técnico barcelonista al final del encuentro. Lo cierto es que Rijkaard se quejaba con razón porque el árbitro anunció 6 minutos de prolongación y sólo se descontaron 5.


Por cierto, al saltar al campo y dirigirse al árbitro apartó de en medio a varios jugadores del Barça que también manifestaban su descontento (eufemismo para decir qu
e se quejaban a grito pelao). El caso es que tuvo la profesionalidad de imponerse y de quejándose él, evitar posibles sanciones a sus jugadores. Un entrenador no sólo demuestra lo bueno que es cuando tiene sistemas defensivos preparados para cada jugada o cuando deja a tres hombres en punta en los córners para evitar barullos en el área, un entrenador demuestra que es un auténtico crack cuando sabe leer el fútbol y encuentra el momento y la forma idónea para quejarse. Rijkaard se lanzó y por primera vez le vimos exaltado, pero hasta eso lo hace con cabeza.

En cuanto a Mourinho, ya sabemos cómo es: un auténtico provocador. La imagen ésta de la izquierda tras marcar Drogba el gol del empate, así lo demuestra. Es maleducado hasta en sala de prensa y quizás por eso, sólo quizás, se negó a hablar en castellano para los medios españoles. Que tome nota la UEFA.

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